Autores: Mayra Artigas
Francisco Toledo
En la actualidad nos enfrentamos con cambios
constantes en la sociedad, se observa que en el mundo organizacional surgen
múltiples situaciones negativas que afectan a su estructura. Algunas de ellas
tienen la capacidad para adaptarse rápidamente y sobrevivir en ese entorno
turbulento, entre otras condiciones; sin embargo, lo ideal es implementar estrategias que vayan en pro de posibles
soluciones, es decir, planificar actividades a objeto de prever, minimizar o
neutralizar posibles problemas. Por tal razón, es importante tener en cuenta
que el éxito de las organizaciones depende del líder, el cual conviene contar
con un conocimiento, una experiencia y voluntad para llevar a buen camino la
misma.
En tal sentido, se señala que dentro de las organizaciones debe haber un gerente que dirija, ejerciendo un liderazgo emocional y transformacional, esto significa que inspira y motiva a sus colaboradores para que alcancen metas que van más allá de sus intereses personales, por el bien colectivo del grupo, bajo una perspectiva ética, humanista, con principios y valores. Si pretendemos influir en las personas, antes de nada, debemos ser capaces de liderarnos internamente, a través de la autogestión de nuestras emociones y pensamientos
En tal sentido, se señala que dentro de las organizaciones debe haber un gerente que dirija, ejerciendo un liderazgo emocional y transformacional, esto significa que inspira y motiva a sus colaboradores para que alcancen metas que van más allá de sus intereses personales, por el bien colectivo del grupo, bajo una perspectiva ética, humanista, con principios y valores. Si pretendemos influir en las personas, antes de nada, debemos ser capaces de liderarnos internamente, a través de la autogestión de nuestras emociones y pensamientos
Dentro de la gerencia
hay que aprender a diferenciar lo que significa liderazgo, poder y autoridad,
ya que dichos términos son confundidos. El poder se puede relacionar con el manejo de autoridad en algunos casos,
conduciendo muchas veces al abuso del mismo; más sin embargo, este puede ser
considerado también un elemento efectivo
para el ejercicio de la autoridad,
logrando así resultados positivos, bienestar para todos los miembros de una
organización tanto pública como privada. Se puede deducir entonces, que existe cierta confusión en torno
al poder y el liderazgo, lo cual puede ser perjudicial; no obstante, hay
quienes afirman que para lograr un liderazgo efectivo, es necesario poseer
tanto el poder pertinente, como la habilidad para saber utilizarlo. Por
lo tanto, el poder es un elemento necesario e importante para el desarrollo gerencial.
El poder se lo ganan los líderes de acuerdo a su personalidad, actividad, o situaciones que marcan su desarrollo
El poder se lo ganan los líderes de acuerdo a su personalidad, actividad, o situaciones que marcan su desarrollo, permitiéndole entonces imponer su voluntad sobre las opiniones o acciones de otros, aunque exista resistencia, lo que significa que el poder está definitivamente influenciado por valores éticos, morales, y socio económico. Claro está que, que el poder no precisamente está vinculado con la agresión, la fuerza bruta, la manipulación o el engaño, sino que también puede considerarse como señal de eficacia, eficiencia personal, como habilidad y destreza para mover, activar recursos; de esta forma, explorar, reconocer y estimular al individuo. Puede ser visto como una habilidad para gerenciar del líder, debido a que incide en la forma de dirección de las organizaciones, guardando una estrecha relación con el entorno social presente.
La autoridad es la capacidad que tiene el líder para impartir órdenes y que las demás personas las cumplan, induciéndoles una establecida forma de actuar, en otras palabras, una persona con autoridad, influye en la actividad o comportamiento de otro individuo o de un grupo, pero se debe emplear sin excesos y atropellos contra los subordinados; por lo que se determina que el poder y la autoridad, constituyen el eje que puede movilizar o paralizar la productividad de las organizaciones; por ello, el liderazgo debe mantener un equilibrio entre estos dos factores a fin de facilitar el logro y consecución de los objetivos propuestos.
El buen uso de la autoridad por parte del
líder, está asociado a la calidad de las conversaciones desarrolladas en la
organización.
Por lo que se puede deducir que, si el
liderazgo se concentra en la información y comunicación oportuna de los
planes, programas y proyectos, establecerá la base para hacer una
eficiente distribución de poder y autoridad, no sólo porque transformaría las
tareas a desarrollar, sino porque permite la toma de decisiones, descubre
potencial específico de los individuos, promueve el trabajo en equipo lo cual
contribuye con los procesos de cambio para la productividad, permitiendo
explorar, experimentar e innovar.
Por
otra parte, se asegura en cuanto al ámbito educativo, que el factor más
importante para conseguir que las instituciones sean competitivas es
su personal (docente, administrativo y ambientalista), lo que significa que el
líder con capacidad de autoridad y poder será quien tenga la
cualidad de potenciar lo mejor de cada uno de ellos, ayudándoles a desarrollar sus
capacidades y contribuyendo
a motivarlos con los objetivos que se quiera alcanzar. Los
directivos tienen que practicar en su comportamiento diario lo
que predican.
De manera que, el liderazgo, incluyendo
el percibido en las instituciones educativas, debe estar más orientado al
desarrollo de la capacidad para obtener ayuda que a la permanencia en el poder,
este último requiere ejercer autoridad, pero de manera natural, sin esfuerzo, con carisma, sobre todo con
capacidad y seguridad para dirigir al grupo. Es importante mencionar, que la
gerencia en el campo educativo, muchas veces, se caracteriza por un liderazgo
impuesto, abusa del ejercicio del
poder, por lo que se sugiere que desarrolle más la capacidad de persuasión
sobre el personal subalterno, desarrollando relaciones cooperativas, siendo
respetuoso de las diferencias, sensible de las necesidades y sentimientos de
los otros, pues es la clave para liderar en tiempos donde la tendencia es a
posiciones radicales y excluyentes.
Cabe destacar que, estudios psicológicos y científicos afirman que no
cualquier persona está preparada para ocupar estos roles y que menos de la
mitad de los líderes observados en cualquier organización demuestran actitudes
realmente sanas en cuanto a cómo se ejerce el liderazgo entre sus pares y sus
subordinados; pues en la actualidad se evidencia que dichos cargos son
asignados a personas que no reúnen los requisitos, sino que lo hacen por
amiguismo político, familiar, entre otros, originando consecuencias negativas,
que pueden conducir al fracaso laboral.
En fin, la
gran mayoría de las organizaciones están estructuradas para otorgar poder, en
las cuales debe prevalecer un clima organizacional basado en el trabajo en
equipo, comunicación, confianza y principios éticos; de esta manera, estar a la
par con los constantes cambios originados en el entorno, así como poseer el
conocimiento de la realidad organizacional y la toma de decisiones asertivas
donde prevalezca el respeto tanto individual como colectivo; puesto que, la
efectividad en la toma de decisiones guarda una estrecha relación con el grado
de poder y su uso, tomando en consideración los criterios de autonomía o
imposición que prevalezcan.
En las organizaciones debe predominar el
trabajo en equipo, comunicación, confianza y principios éticos.
Liderazgo Democrático como alternativa para mejorar el desempeño docente
Las imágenes que se presentan continuación, muestran la forma como conviene actuar un docente dentro del aula de clase, el cual debe ser un líder transformador, que se adapte a los cambios a los que hay que enfrentarse día a día; siendo capaz de formar niños y niñas que asuman una postura crítica, reflexiva ante la vida, basada en los valores.
En otras palabras, es necesario que el docente ejerza un liderazgo democrático, en el que se desenvuelva como guía, ya que son los estudiantes quienes deben construir sus aprendizajes significativos, a través de sus experiencias y conocimientos previos; capaces de enfrentarse y actuar ante cualquier situación negativa que se les suscite, buscando alternativas que conlleven a una solución.
REFERENCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
Liderazgo
en las organizaciones. Disponible
en: http://www.gestiopolis.com/liderazgo-en-las-organizaciones-y-su-importancia/.
[Consultado: junio 2016].
Suárez, Nicolás.
Relación entre liderazgo y poder en la empresa. [Blog Internet]. Disponible
en: http://www.nicolassuarez.es/2011/06/14/relacion-entre-liderazgo-y-poder-dentro-de-las-empresas/.
[Consultado: julio 2016].
Cáceres, Guido.
Liderazgo Educativo. [Blog Internet].
Disponible en: http://doctoradoliderazgoeducativo.blogspot.com/2012/03/autores-alecci-montilla-regina-beuses.html. [Consultado: julio 2016].
Flores, Francisco. Liderazgo; Autoridad y Poder. Disponible en: http://es.slideshare.net/FRANCISCO_CENEPA/liderazgo-autoridad-y-poder-12055947.
[Consultado: julio 2016].
Muy interesante el tema, es necesario establecer la diferencia entre poder, autoridad y liderazgo, ya que existe confusión, hoy en dia se requiere de veraderos lideres que lleven a lograr el éxito de la organización con la intencionalidad de satisfacción grupal, siempre pensando en el bien común sin que el grupo sienta que le dan ordenes, es decir esa presión de tener un lider autoritario y lleno de poder.
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